Reciclar muebles con otro uso es el objetivo de legiones de crafters y amantes del bricolaje… Por eso, el reciclaje creativo de una vieja silla que ha cumplido su misión con creces se ha convertido en el homenaje que esta «manitas» quería hacerle a un mueble que nos ha acompañado durante toda la infancia de los peques…
Cortada en dos y pintada con el esmalte acrílico de Bruguer, que hace un efecto chalk paint (la famosa pintura de tiza), la silla se ha transformado en galán de noche y mesita tocador. ¡Increíble el cambio!
La silla, un modelo Ingolf de Ikea de hace 12 años, se ha portado como una campeona todo este tiempo: las cuatro sillas de Ikea situadas en el office de la cocina han sobrevivido a un uso intensivo: tres comidas diarias de cuatro personas, incluidos dos niños.
Las sillas han dado tan buen resultado que hemos comprado otras cuatro del mismo modelo. Eso sí, han sufrido un pequeño restyling, y se ha mejorado el sistema de fijación de la estructura con las patas: ¡quién sabe cuánto durarán las nuevas;-) jeje!
Cómo surge la idea… ✌
La silla es ya inservible para su función original porque las patas se separan de la estructura al haberse holgado ya demasiado las uniones. Por eso se nos ocurre una idea de reciclaje creativo: partirla en dos para construir por separado con sus dos mitades un galán de noche, por un lado, y una mesita tocador, por otro. Su destino será un dormitorio en la buhardilla de la casa.
Aprovechamos también esta tarde de reciclar muebles para pintar en con el mismo esmalte acrílico de Bruguer un viejo espejo redondo de baño de madera de color miel. Un primer intento de pintarlo en blanco con pinturas de spray de bazar resultó infructuoso, así es que vamos a aplicar el esmalte por encima de esta primera capa de pintura que hará las veces de imprimación.
Materiales para el DIY reciclar muebles
- Silla vieja
- Sierra de calar
- Taco o papel de lija fina
- Lápiz, cinta métrica, regla
- Esmalte acrílico de Bruguer mate, color blanco lino
- Brocha o rodillo
El proyecto «De silla a galán de noche» paso a paso…
Es fácil realizar este proyecto con ayuda de muy poca herramienta… Veamos el proceso:
1.Mide y marca con lápiz la línea por la que cortarás la silla en dos.
2. Inicia el corte con la sierra de calar, comenzando por el faldón lateral si lo ves necesario, y siguiendo la marca a lápiz.
3. Remata el corte en el faldón lateral sujetando firmemente la sierra de calar. Si no tienes sierra, siempre puedes hacer el trabajo con serrucho, aunque tardarás más y tendrás que lijar muy bien el corte.
4. Limpia con un paño húmedo y detergente y lija la silla suavemente con un taco de lijar para eliminar adherencias, etc. Se trata de crear una superficie en la que el esmalte acrílico agarre bien. El esmalte acrílico de Bruguer no necesita imprimación previa en superficies como esta madera teñida y encerada.
5. Este es el esmalte acrílico que vamos a utilizar. La verdad es que se nota la diferencia con los típicos esmaltes oleosos para bien… El esmalte acrílico de Bruguer no tiene olor, y las brochas se limpian con agua con toda facilidad. Además se extiende que es un gusto… Los colores son preciosos y el tacto final de las superficies, como si fueran de seda.
6. Da vueltas a la pintura antes de empezar. Aunque no hemos observado que pigmentos y base tiendan a disgregarse en esta pintura, lo cierto es que es importante hacerlo como norma para aprovechar todas las cualidades de los productos.
7. Moja la brocha ligeramente antes de empezar, elimina el exceso de agua y toma un poco de pintura. Aplica una primera capa de esmalte acrílico estirando muy bien cada pasada. Cuidado con dejar pelos de brocha. Si te ocurre, puedes quitarlos con ayuda de un cúter en cualquier momento. Si la capa ya está seca, entonces repara la línea que quedará marcada con un pincel mojado en el esmalte. Respeta los tiempos de secado indicados en el bote antes de volver a pintar.
8. Da una mano de lija suave entre capas de esmalte para eliminar las zonas donde la pintura pueda estar engrosada, goterones, etc. Recuerda que siempre es mejor dar dos o tres capas más finas de pintura que una sola muy gruesa.
9. Aprovecha la segunda capa de esmalte para acceder a todos los recovecos del mueble utilizando una brocha más pequeña. Si es necesario moja un poco la brocha antes de tomar la pintura para que, diluida, llegue a todos los rincones.
Aquí tienes resumido también el trabajo sobre el asiento de la silla (futura mesita de noche) y el espejo que complementará a ambas piezas.
10. Monta un par de escuadras no muy grandes en la pared para sujetar el nuevo galán de noche. Necesitarás medir desde el suelo la altura de la pared en la que irá situado, y hacer dos marcas con nivel. En este friso de la pared se puede atornillar directamente la escuadra, al igual que haremos con la otra parte en la media silla. Lo mismo vale para la mesita…
Aquí está el resultado, que nos gusta especialmente. Puedes también lijar ligeramente para que salga el tono natural de la madera debajo de la pintura: queda muy chic imitar así muebles antiguos…
¿Te gusta reciclar muebles? Y tú, ¿qué harías con una vieja silla desvencijada…?
Si quieres ver más muebles reciclados, echa un vistazo a nuestra selección en la categoría de reciclaje.
¡Un resultado muy bonito! Una forma muy original de reutilizar una vieja silla que ya no nos gusta. 😉
Cierto! A veces guardamos una vieja silla descabalada que perteneció a la familia sin saber muy bien dónde situarla… Esta puede ser una bonita opción!!
Me encanta el resultado. La idea me parece muy buena. La pintura que has utilizado deja un acabado muy bonito.
Gracias, Almudena! Lo cierto es que estos esmaltes acrílicos de Bruguer son estupendos: fáciles de aplicar, sin olor, secado rápido y con un tacto sedoso que da gusto. El efecto chalk paint es increíble, pero con la dureza de un esmalte!